En el marco de la conmemoración del día Internacional de la Mujer, es importante mencionar que formar mujeres fuertes, seguras, plenas e independientes no es tarea fácil, pero sí lo podemos lograr y en este aspecto, la familia es pieza clave.
Fomentar una relación fuerte entre los miembros, debe ser tarea de todos los días.
Y para ello, fortalecer la relación entre mamá e hija, puede ayudarnos a que las otras actividades que se llevan a cabo con los demás miembros de la familia crezcan.
“La relación entre madres e hijas es un lazo que se nutre de la complicidad y la fortaleza”
Por esto, si has notado que tu hija ya no platica contigo como antes, checa estos consejos que seguro te ayudarán a mejorar tu comunicación con ella.
1. En los escasos momentos en los que se decide a hablar contigo, intenta estar “en su onda”, es importante que tu hija se sienta COMPRENDIDA y APOYADA.
2. ¡ESCÚCHALA! con serenidad, no te anticipes ni interpretes. Permite que sea ella quien te cuente sus inquietudes y preocupaciones.
3. Deja de hacer todo lo que estés haciendo y disponte a conversar con ella, que perciba que te importa todo lo que le sucede.
4. Deja que se explaye, asiente con la cabeza y mantén en todo momento contacto visual.
5. Habla en POSITIVO con tu hija y nunca minimices sus preocupaciones, evita frases como “no es para tanto”.
6. En su lugar, utiliza frases de conexión tales como “veo que esto te afecta”, “sé que esto es importante para ti”…
7. Comparte efectivamente las normas y valores de casa. Recuerda que nuestras hijas aprenden por imitación, por esto siempre debes darle un buen ejemplo.
8. En tu casa, trata de crear un ambiente agradable, en el que se sienta tranquila: Recuerda que la relación que tengas con tu hija impacta directamente en su desempeño escolar y en su comportamiento, no dejes que la falta de comunicación afecte su aprovechamiento académico.
9. Nunca la compares con otras personas y mucho menos con sus hermanos, a nadie le gusta ser comparado con alguien más, en su lugar, mejor resalta sus talentos.
10. Evita las amenazas y déjale claras las consecuencias por incumplir las reglas de la casa. Cuando sea necesario, mantente firme en aplicar la consecuencia.
Sin ir más allá, debemos entender que a veces nuestras hijas no tienen ganas de estar con nosotras y no pasa nada, recuerda que son adolescentes y ellas disfrutan sus momentos con niñas de su edad. ¡Escúchala, entiéndela, aprovechen los momentos en donde puedan fortalecer esos lazos y sobre todo, haz que en todo momento prevalezca el respeto!
En el Triana somos los principales aliados de los padres, y los acompañamos ofreciéndoles una gran variedad de cursos, talleres, congresos, convivencias, para que puedan desempeñar el papel más importante de su vida… “ser los mejores padres”.
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